En este artículo, nos sumergiremos en las apasionadas palabras de Juan Bellido de Luna, quien nos ofrece una lista efusiva de destacados anexionistas que, a lo largo de la historia, han abrazado la idea de la unión de Cuba con los Estados Unidos. Exploraremos el fervor y la convicción expresados por Bellido de Luna al resaltar la visión de estos personajes históricos, quienes no solo no temían la anexión, sino que la consideraban como una bendición para la isla caribeña.
"Si, arrastrada por las circunstancias, tuviera que arrojarse en brazos extraños, en ningunos podría caer con más honor y más gloria que en los de la Gran Confederación Norte-Americana. En ellos encontraría paz y consuelo, fuerza y protección, justicia y libertad; y apoyándose sobre tan sólidas bases, en breve exhibiría al mundo el portentoso espectáculo de un pueblo que, del más profundo abatimiento, se levanta y pasa con la velocidad del relámpago al más alto punto de grandeza."
1. Félix Varela (20 de Noviembre de 1788 – 18 de Febrero de 1853)
2. José de la Luz Caballero (11 de julio de 1800 – 22 de junio de 1862)
3. José María Heredia (31 de Diciembre de 1803 – 7 de Mayo de 1839)
4. Nicolás Escobedo
5. José de la Luz Hernández
6. Anacleto Bermúdez
7. Cristóbal Madan
8. Gaspar Betancourt Cisneros (28 de abril de 1803 – 7 de diciembre de 1866)
9. Manuel de Jesús Arango
10. Porfirio Valiente (9 de agosto de 1807 – 12 de noviembre de 1870)
11. Pablo y Andrés Duany
12. José Elías Hernández (Muere en 1878)
13. Ramón de Palma (3 de enero de 1812 – 21 de julio de 1860)
14. José María Casal
15. Miguel Tolón (20 de septiembre de 1820 – 16 de noviembre de 1857)
16. Manuel Rodríguez Mena
17. Leopoldo Turla (1818 – 20 de marzo de 1877)
18. José Agustín Quintero (6 de mayo de 1829 – 7 de septiembre de 1885)
19. Ramón Ignacio Arnao
20. Narciso López (2 de Noviembre de 1797 – 1 de Septiembre de 1851)
21. Domingo de Goicouria (23 de junio de 1810 – 7 de mayo de 1870)
22. Ramón Pintó (20 de junio de 1803 – 22 de marzo de 1855)
23. Francisco Estrampes (1 de diciembre de 1829 – 31 de marzo de 1855)
24. A. Félix
25. Luis Eduardo del Cristo (7 de abril de 1820 – 1871)
26. Juan González Álvarez
27. Juan Cadalso
28. Doctor Pinelo
29. Doctor Antonio Gasslie
30. Manuel Costales (24 de junio de 1815 – 22 de marzo de 1866)
31. Francisco de la O. García
32. Lorenzo de Allo
33. Aniceto y José Sánchez Iznaga (21 de abril de 1791 – 3 de diciembre de 1860)
34. Pedro José Guiteras (17 de marzo de 1814 – 3 de febrero de 1890)
35. Benigno Gener (8 de julio de 1819 – 12 de diciembre de 1890)
36. Carlos del Castillo
37. Conde de Pozos Dulces (Francisco de Frías y Jacott, IV)(24 de septiembre de 1809 – 1877)
38. Conde de Casa Brunet
39. Joaquín de Agüero y Agüero (15 de noviembre de 1816 – 12 de agosto de 1851)
40. Isidoro Armenteros (4 de noviembre de 1808 – 18 de agosto de 1851)
41. Carlos Manuel de Céspedes (18 de abril de 1819 – 27 de febrero de 1874)
42. Francisco Vicente Aguilera (23 de junio de 1821 – 22 de febrero de 1877)
43. Donato Mármol (14 de febrero de 1843 – 20 de noviembre de 1870)
44. José Morales Lémus (10 de mayo de 1808 – 23 de junio de 1870)
45. José Antonio Echeverría
46. José Manuel Mestre
47. Miguel Aldama (8 de mayo de 1820 – 15 de marzo de 1888)
48. Ramón Martínez Hernández
49. José María Mora
50. Francisco Alejandro Lainé
51. Manuel H. Ramírez
52. José Eusebio y Julián Alfonso
53. Joaquín Ayestarán
54. Francisco Fesser
55. Pedro y Francisco Diago
56. Miguel Cantos
57. Juan Clemente Zenea (24 de febrero de 1832 – 25 de agosto de 1871)
58. Adolfo Cavada (17 de mayo de 1832 – 18 de diciembre de 1871)
58. Federico Cavada (8 de julio de 1831 – 1 de julio de 1871)
59. Ambrosio González (3 de octubre de 1818 – 31 de julio de 1893)
60. Francisco Javier Cruz
61. Félix M. Tanco
62. José Victoriano Betancourt
63. Juan Díaz Villegas (24 de junio de 1821 – 7 de junio de 1888)
64. Reverendo Joaquín Palma
65. Rafael María Mendive (24 de octubre de 1821 – 24 de noviembre de 1886)
66. Joaquín Delgado
"y otros mil cubanos de la generación pasada que no temían, sino que, por el contrario, consideraban la anexión a los Estados Unidos como una bendición del cielo para Cuba; y del mismo modo piensan muchos cubanos ilustrados y de buen sentido de la presente generación, que desean la felicidad de su patria por medio de un cambio favorable que la libre para siempre del inaguantable dominio de España: porque piensan con sobrada sensatez que salir de la abyecta condición de colonos antillanos, súbditos de la monarquía española, para entrar a disfrutar de las prerrogativas del ciudadano libre de la República Madre Americana, equivale a salir de los tormentos del Purgatorio para entrar en la mansión encantadora del Paraíso terrenal de que nos hablan las Sagradas Escrituras."
En su influyente obra "La Anexión de Cuba a los Estados Unidos", Juan Bellido de Luna ha compilado esta significativa lista de ilustres anexionistas que desempeñaron un papel destacado en la historia de la lucha por la anexión del territorio cubano en la gran Unión. No obstante, la modestia característica de Bellido de Luna lo llevó a omitir su propio nombre de dicha lista.
Es crucial destacar la figura de Juan Bellido de Luna como uno de los prominentes anexionistas que contribuyeron de manera significativa a la causa. Su ferviente compromiso con la idea de la anexión no solo lo sitúa como un historiador imparcial, sino como un defensor apasionado de la integración de Cuba a los Estados Unidos. Al incluir su nombre al final de la lista, reconocemos no solo su modestia sino también su valiosa contribución a la narrativa histórica.
Bellido de Luna se erige como un ilustre defensor de la anexión, no solo por la unificación territorial, sino también por la firme convicción de que esta integración brindaría a los individuos en Cuba la oportunidad de disfrutar plenamente de la libertad individual.
Juan Bellido de Luna (1828 – 30 de Abril de 1902)
En palabras de Juan Bellido de Luna, la imposibilidad de incluir a todos los ilustres anexionistas en su lista subraya la amplitud y diversidad de intelectuales y militares que conformaron este movimiento trascendental. Su trabajo no solo ofrece un vistazo a la rica variedad de pensadores y líderes involucrados, sino que también desmantela las narrativas históricas distorsionadas propagadas por manos nacionalistas.
Bellido de Luna arroja luz sobre la importancia fundamental del movimiento anexionista, una pieza esencial y a menudo menospreciada en la historia. Su enfoque crítico desafía la ignorancia y desdén que algunos sectores nacionalistas han dirigido hacia la lucha anexionista. Destaca que fue este movimiento el primero en desencadenar la intervención de Estados Unidos en la guerra contra España, un factor crucial que eventualmente llevó al triunfo en la contienda.
Bellido de Luna no solo corrige distorsiones históricas sino que también destaca la importancia de comprender el complejo tejido de eventos que condujeron a la intervención estadounidense y, finalmente, a la victoria en la guerra.